Agustín Álvarez, de Metaltécnica: “En más de treinta años, hemos crecido y producimos para firmas líderes. Pero seguimos manteniendo un concepto de empresa familiar, de trato preferencial con los clientes y mucho cuidado del producto”
Es un tradicional integrante de la actividad gremial empresaria de la región. “No me gusta quejarme y no hacer nada”, dice. Es socio gerente de la firma rosarina, que hoy fabrica agropartes para Fiat Case New Holland y John Deere, o elementos de la industria ferroviaria a NCA y Ferro Pampeano. Fundó Metaltécnica en 1981, junto a su hermano. Hoy, ambos siguen en actividad. Con 70 empleados, venden en Argentina y el exterior. En esta nota, nos cuenta su historia.
¿Cuál es su cargo en la empresa?
Alvarez: Soy socio gerente y fui uno de sus fundadores, en 1981. A esta historia de Metaltécnica la iniciamos con mi hermano y todavía hoy estamos juntos. El está en la parte de Producción, yo en Materiales, Tratamientos Térmicos y Relaciones Institucionales.
Cuentenos algo de la historia de la firma…
Álvarez: Los dos veníamos de la industria del tractor. El del área de Ingeniería y yo estaba en Desarrollo de Materiales. Pedimos prestados 500 dólares a la que entonces era la novia de mi hermano y nos animamos a empezar. Yo soy español, nacido en León, había llegado de muy pequeño a la Argentina. Mi hermano es más chico, nació acá. Los dos éramos muy jóvenes cuando decidimos empezar con la fábrica. En aquel momento, en los inicios de la década del ’80, por el conocimiento que traíamos de la actividad agropecuaria, sabíamos que se usaba la labranza vertical, para la cual se necesitaban arcos de cincel, que tenían un requerimiento importante en materia de resistencia a la fatiga. Ahí encontramos un nicho y tuvimos enseguida mucha demanda. Luego, con el paso del tiempo la labranza vertical fue disminuyendo, en la medida en que avanzó la siembra directa. Y nosotros nos fuimos dedicando más a partes que tienen que ver con esa nueva técnica que iba apareciendo.
¿Y en estos más de 30 años, cómo los han tratado los vaivenes de la economía nacional?
Álvarez: Las hemos ido sorteando y aprendiendo un poco de cada crisis. Por ejemplo, hemos ampliado el espectro de nuestros productos, y hace tiempo trabajamos también con la industria del ferrocarril, para no tener un solo rubro. Hoy, empresas líderes como NCA y Ferro Pampeano son clientes nuestros. Y en materia agropecuaria, firmas internacionales como FIAT Casé New Holland y John Deere, nos compran agropartes.
Esa relación con FIAT NCH o John Deere debe haberles significado alcanzar determinado standard de producción que les permita convertirse en proveedores, ¿es así?
Álvarez: Sí, nosotros somos auditados permanentemente. Las terminales, como FIAT CNH o John Deere, nos traen planimetría, que nos obliga a tener nuestro sistema de trazabilidad en forma muy prolija. El layout de la empresa, por ejemplo, también está supervisado por estas terminales. En el caso de John Deere, ellos categorizan a sus proveedores, y nosotros estamos hemos calificado en una categoría intermedia, a la que no es fácil acceder.
¿Cuántos empleados tienen hoy?
Álvarez: En la actualidad tenemos 70, en una planta de casi 5 mil metros, en un predio de 10 mil metros cuadrados en total. Hemos crecido y nos hemos profesionalizado mucho, aunque seguimos teniendo el mismo respeto por la gente que trabaja con nosotros que tuvimos siempre. Cuando arrancamos, éramos sólo dos, mi hermano y yo. Al poco tiempo, incorporamos nuestro primer empleado. Y hoy, en 2014, aquel primer obrero que vino a trabajar con nosotros, sigue en la fábrica. Mantenemos un concepto de empresa familiar, también en el trato preferencial con los clientes, en el cuidado del producto.
¿Qué considera que los clientes eligen de Metaltécnica?
Álvarez: Podría decir que nuestro valor agregado es la experiencia. Y que los clientes siguen confiando en nosotros, porque los hemos asesorado en la mejora de sus productos.
¿Venden al exterior?
Álvarez: Sí. Ahora, precisamente, hemos podido llegar a Estados Unidos, tenemos un representante nuestro allá. Ese es un mercado al que hemos ido con el apoyo del gobierno provincial. Creemos que es posible cerrar allá buenos negocios, hemos mandado partes. En el último tiempo, lo que pudimos exportar fue a Bolivia y a Uruguay. Hemos tenido épocas en las que la competitividad era mejor, y cerca de un 10 por ciento de nuestra producción se vendía en el exterior. Aunque cuando cambia el ciclo económico se pierde mucho, porque todo lo que cuesta ganar un mercado exterior, se pierde. Entonces, nosotros apuntamos a que incluso en ciclos económicos en los que la relación de nuestra moneda con el dólar ha permitido tener una buena posición afuera, no tener nunca más de un 20 por ciento de ventas en el mercado externo, para no depender tanto de que se mantenga esa coyuntura cambiaria, que no depende de nosotros.
¿Cuál es su experiencia de la participación en ferias?
Álvarez: Creo que a pesar de las dificultades que puedan aparecer, hay que tratar de estar. Porque son vidrieras importantes. Nosotros siempre buscamos de participar en las ferias sectoriales más trascendentes. Y a veces nos toca elegir. Este año, por ejemplo, no fuimos a Expoagro, pero sí vamos a estar en Agroactiva. Porque algo que hemos aprendido con el tiempo es que en algunos lugares es más caro no estar, que estar. Nosotros tenemos una marca que es Agroflex, que debe “estar” en ese tipo de eventos, porque es lo que le sigue dando vigencia.
¿Tiene alguna actividad gremial empresaria?
Álvarez: Sí, porque no me gusta eso de quejarme y no hacer nada para que cambien las cosas. Participo desde 1985 en la Cámara de Comercio Exterior de Rosario, de la que fui presidente durante un par de ciclos. También fui uno de los fundadores de la Agencia de Desarrollo Regional Rosario, a instancias en su momento de Hermes Binner. Siempre estoy integrado a la ADERR. Creo que el objetivo de las Agencias de Desarrollo es muy noble, porque se trabaja por la promoción del trabajo, de crear más empleo. Por eso, si tuviera que dejar un mensaje final a mis colegas pyme, diría que no dejen nunca de lado los sueños. Porque las pequeñas y medianas empresas tenemos que ir siempre para adelante, pase lo que pase. Sobre todo pienso en los más jóvenes, y les digo que tenemos que trabajar todos los días un poco mejor, siempre buscando con esfuerzo estar en la cima de la tecnología, del desarrollo.
HINCA, UN PRODUCTO QUE METALTÉCNICA UBICA EN MERCADOS INTERNACIONALES
El domingo 6 de abril, Agustín Álvarez fue entrevistado por la periodista Patricia Martino, en nota en el diario La Capital. Allí, brindó detalles sobre el nuevo proyecto de su empresa, como es la fabricación de la herramienta Hinca, producto neozelandés con más de una década de presencia en mercados europeos.
Según reveló en nota con La Capital, un matrimonio argentino quiso comenzar a producir Hinca en el país, tras descubrir sus “magníficas cualidades”. Entonces, los tenedores de la patente salieron a buscar una firma local que pueda fabricar la herramienta y vieron que Metaltécnica podía aportar las mejores condiciones. Contó Álvarez al diario rosarino: “Nos contactaron a través de Siderar, que es nuestro proveedor de acero, nos entusiasmó mucho la propuesta y por eso nos sumamos al proyecto para introducir Hinca en toda América latina y Estados Unidos. Con la fabricación de esta herramienta potenciamos la proyección internacional de la empresa”.
Hinca es una herramienta mecánica multitarea que hace más fácil los trabajos más duros. Penetra en toda superficie y debido a su dureza hace posible cortar raíces subterráneas, remover suelos duros o muy compactos y hasta romper concreto y piedra sin esfuerzo físico o ruidos molestos. Esta herramienta puede ser utilizada para tareas de construcción, jardinería, paisajismo, minería, alambrado, agricultura, demolición, turismo aventura y primeros auxilios.
LINK A LA NOTA COMPLETA EN “LA CAPITAL”:
http://www.lacapital.com.ar/economia/Metaltecnica-herramienta-con-sello-local-20140406-0007.html