La firma nació hace casi 90 años. Nació como un pequeño taller, fundado por el bisabuelo de su actual titular, Ángel Fontanet. Una empresa familiar que desde Rafaela logró prestigio en el país y la incorporación a importantes mercados.
¿Cuál es su cargo en la empresa?
Lovera: Estoy a cargo del Departamento Comercial. Integro la firma desde hace seis años.
¿Cómo es la historia de la empresa?
Lovera: La firma tiene casi 90 años. Nació en 1926 en Rafaela y hoy sigue estando ubicada en el mismo lugar. Empezó en un pequeño taller mecánico ubicado de Ángel Fontanet, que fue el bisabuelo de quien hoy preside la empresa, el Ingeniero Ángel Fontanet. Al comienzo, se hacían pequeñas calderas verticales y prensas para caseínas. Con el tiempo se fueron ofreciendo productos hacia nuevos sectores como el forestal, químico, petroquímico, alimenticio y textil, entre otros. Siempre con un alto nivel de especialización y cuidado por la calidad.
¿Qué puede decir del presente de Fontanet?
Lovera: Hoy somos una de las tres empresas líderes en calderas a nivel nacional. Y tenemos una fuerte presencia a nivel internacional. Nuestros equipos son reconocidos en mercados como el de Uruguay, Brasil, Paraguay, Bolivia, Chile, Perú, Colombia Venezuela, México, Panamá, Costa Rica, Egipto, Honduras, Siri Lanka o República Checa.
¿Cuál ha sido la clave para llegar a tantos países?
Lovera: En muchos de estos lugares tenemos una representación. Es decir, la estrategia comercial ha sido muy agresiva. Pero además, tenemos una empresa con mucha trayectoria y un producto que ya es muy reconocido. Además, tenemos muy buen precio.
¿Qué cantidad de empleados tienen?
Lovera: La empresa tiene 40 empleados, que trabajan en un turno. Esto nos permite abastecer a todos los clientes. El 10 por ciento de lo que vendemos es para la industria láctea, también hacemos calderas para frigoríficos, para la industria de balanceado, para la industria de la madera, entre otros mercados.
¿Participan de cámaras empresariales?
Lovera: Sí, en muchas. La última a la cual nos hemos incorporado a la del cartón corrugado. Esa participación en asociaciones y cámaras nos permite estar en contacto con muchas empresas, relacionarnos para saber cuál es la demanda, mejorar. Ahí tenemos también posibles clientes. Por esto también consideramos clave la integración de las cadenas de valor.
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